¿Nearshoring, qué es y cómo beneficiará a Sonora?
El Nearshoring se está convirtiendo en una práctica empresarial cada vez más popular en México, y el estado de Sonora tiene la oportunidad de beneficiarse de esta tendencia. Sonora cuenta con una posición geográfica privilegiada, recursos naturales y una mano de obra calificada a precios competitivos, lo que la convierte en un lugar ideal para la inversión extranjera.
“Nearshoring” se refiere a la práctica empresarial de contratación de servicios o la producción de bienes en países con cercanía geográfica al país de origen. Esta práctica ha despuntado en ciudades como Monterrey con la llegada de Tesla, y Tijuana con una gran industria estadounidense, y se espera que próximamente se puedan dar las oportunidades para el estado de Sonora en el ramo energético.
La pandemia de COVID-19 ha afectado significativamente la economía mundial, incluyendo la cadena de suministro global y la producción en China. La crisis sanitaria ha puesto de manifiesto la vulnerabilidad de la dependencia excesiva de China en la cadena de suministro global, especialmente en sectores críticos como la fabricación de equipos médicos, eléctricos y suministros de protección.
Como respuesta, algunos países, incluyendo a Estados Unidos, han buscado reducir su dependencia de China y trasladar parte de su producción a países más cercanos geográficamente como México.
En este contexto, Sonora se presenta como un lugar atractivo para las inversiones. La entidad, con una milenaria vocación minera, ha descubierto un nuevo plan de negocio en las tierras de Bacadéhuachi: el litio, mineral esencial en las baterías de todos los dispositivos eléctricos y con el auge de los automóviles eléctricos se ha vuelto aún más codiciado. Sonora tiene grandes reservas de litio, lo que la convierte en una región muy atractiva para las empresas que buscan invertir en la producción de baterías.
Así mismo, la estrategia tiene como un pilar importante la construcción de la planta fotovoltaica más grande de América Latina, en Puerto Peñasco, que una vez terminada ocupará una extensión de 2.000 hectáreas y alcanzará una capacidad de generación de 1.000 megavatios (MW), lo que le permitirá —según la CFE— beneficiar a 536.000 hogares y evitar la emisión de alrededor de 1,4 millones de toneladas de dióxido de carbono al año.
El Plan Sonora también contempla la construcción de una red de factorías de licuefacción de gas natural proveniente de Estados Unidos, así como la modernización del puerto de Guaymas como un centro logístico, la mejora de carreteras y la ampliación de conectividad aérea.
En definitiva, el Nearshoring se está convirtiendo en una práctica empresarial cada vez más popular en México y el estado de Sonora tiene la oportunidad de beneficiarse, tiene los recursos naturales, la ubicación geográfica, el contexto internacional de una creciente necesidad de independizarse de China, y el espaldarazo del Gobernador Alfonso Durazo y del Presidente Andrés Manuel López Obrador.
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