Por Luis Fernando Heras Portillo
Con la inminente creación de la “Agencia de Transformación Digital y Telecomunicaciones” anunciada por la virtual presidenta electa, Claudia Sheinbaum Pardo, México se prepara para una profunda revolución en la forma en que se gestionan los trámites gubernamentales. Inspirada en la Agencia Digital de Innovación Pública (ADIP) de la Ciudad de México, esta nueva agencia promete simplificar y modernizar las interacciones entre los ciudadanos y el gobierno, abriendo un mundo de posibilidades para una administración pública más eficiente y accesible.
La necesidad de esta agencia es clara: México, como muchos otros países, enfrenta desafíos significativos debido a la burocracia y la ineficiencia en la gestión de trámites. Actualmente, los ciudadanos deben enfrentarse a procesos largos, complicados y, a menudo, frustrantes para realizar actividades básicas como obtener una licencia de construcción o acceder a servicios de salud. La digitalización de estos procesos no solo ahorrará tiempo y recursos, sino que también mejorará la calidad de vida de los mexicanos al reducir las largas filas y los interminables papeleos.
Para que la digitalización sea efectiva, es crucial que exista una coordinación estrecha entre el gobierno federal, los gobiernos estatales y los municipales. Esta colaboración permitirá que la nueva agencia pueda invertir en la infraestructura necesaria para digitalizar los trámites en todo el país, enfocándose en al menos las 500 ciudades más importantes de México. La implementación de tecnologías digitales debe ser uniforme y coherente en todas las instancias de gobierno para garantizar que todos los ciudadanos, sin importar su ubicación, se beneficien de esta transformación.
Un ejemplo notable que podría servir de modelo es el del Instituto Nacional Electoral (INE). La credencial para votar del INE incorpora dos códigos QR en su parte trasera: uno que contiene información detallada del titular, incluyendo sus datos personales y otro que almacena sus huellas dactilares y un escaneo facial. Este sistema permite una verificación rápida y precisa de la identidad del ciudadano, evitando fraudes y simplificando numerosos trámites. Este tipo de tecnología debería ser adoptado por otras instituciones como el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), el ISSSTE y el Infonavit, que manejan millones de usuarios y donde la verificación digital podría agilizar enormemente los procesos.
La digitalización puede tener un impacto significativo en la eficiencia de trámites esenciales como la obtención de licencias de construcción, permisos de uso de suelo, y la aprobación de proyectos ejecutivos. Actualmente, estos procesos pueden tardar semanas o incluso meses. En contraste, en Estados Unidos es posible completar estos trámites en tan solo 15 minutos gracias a sistemas digitales avanzados. Adoptar un enfoque similar en México no solo desburocratizaría los procesos, sino que también reduciría las oportunidades de corrupción al minimizar las interacciones personales y algunas malas prácticas como los sobornos.
La creación de la agencia de digitalización es especialmente prometedora para el sector empresarial. La capacidad de realizar trámites de manera rápida y eficiente es un sueño para los empresarios, quienes a menudo enfrentan largos retrasos que afectan negativamente sus operaciones. Un gobierno que facilita estos procesos no solo promueve el crecimiento económico, sino que también atrae inversión extranjera, mejora la competitividad y fomenta la innovación.
Una de las claves para el éxito de la digitalización es la implementación de una ventanilla única, donde los ciudadanos puedan realizar todos sus trámites en un solo lugar. Además, es fundamental que exista una homologación de los procesos entre los diferentes niveles de gobierno. Esto significa que los trámites deben ser coherentes y estandarizados en todas las instancias gubernamentales, facilitando así su gestión y evitando duplicidades.
La utilización de tecnologías avanzadas como los códigos QR, los códigos de barra y otros instrumentos de verificación instantánea es esencial para garantizar la precisión y la seguridad de los procesos digitales. Además, la automatización de los pagos en línea no solo ahorra tiempo, sino que también reduce el riesgo de corrupción al eliminar la necesidad de interacciones personales para realizar pagos.
A pesar de los numerosos beneficios, la implementación de una agencia nacional de digitalización enfrenta desafíos significativos. Es crucial desarrollar software inteligente capaz de verificar rápidamente la información de los ciudadanos mediante inteligencia artificial. Además, debe existir una infraestructura robusta para manejar grandes volúmenes de datos y garantizar la seguridad de la información personal.
La creación de la “Agencia de Transformación Digital y Telecomunicaciones” marca un paso significativo hacia un futuro más eficiente y moderno para México. La digitalización de los trámites gubernamentales no solo mejorará la calidad de vida de los ciudadanos, sino que también fortalecerá la economía al facilitar las operaciones empresariales. Si se implementa correctamente, esta agencia puede transformar radicalmente la relación entre los ciudadanos y el gobierno, eliminando las barreras burocráticas y abriendo el camino hacia una administración pública más transparente, eficiente y accesible.
En conclusión, la digitalización de los trámites gubernamentales es una oportunidad única para que México avance hacia un futuro más moderno y eficiente. La creación de la “Agencia de Transformación Digital y Telecomunicaciones” es un paso audaz en esta dirección, y su éxito dependerá de la coordinación efectiva entre los diferentes niveles de gobierno y la adopción de tecnologías avanzadas. Con una implementación cuidadosa y estratégica, México puede liderar el camino hacia una administración pública del siglo XXI.
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