Es importante dejar de lado la simulación y tener congruencia para DIGNIFICAR LA POLÍTICA:
Juan Pablo Ladriere
Dirigente de Juventud Verde
- Tenemos un reto enorme en dignificar la política entre los jóvenes.
- En las elecciones pasadas solo votó el 30% de la juventud sonorense; hay una preocupación muy fuerte en la participación juvenil.
- Gracias al trabajo de las asociaciones civiles “La Sauceda” será un tema prioritario para el Gobierno de Sonora.
- Me gustaría ser recordado como una persona que nunca puso un interés político antes que hacer las cosas bien.
Por Jaime Almada y Emmanuel Quintana
“Lo que toca hacer para dejar la apatía política a un lado, es dejar de simular, que la narrativa sea congruente con lo que estás haciendo. Mientras no generemos espacios donde se pueda participar, se generarán perfiles jóvenes sin interés en las problemáticas”, aseveró Juan Pablo Ladriere Sugich, sobre cómo superar la apatía política de la juventud actual.
Para Barra Joven de Nuevo Sonora, el dirigente de Juventud Verde, nos compartió que ha estado participando en algunas pláticas, en conjunto con el IEE Sonora y el Instituto Sonorense de la Juventud, llamado “Mi primer voto”, con los cuales buscan incentivar la participación ciudadana en jóvenes de preparatoria.
Esta iniciativa nació a partir de una estadística que lanzaba que solamente el 30% de la población joven votó en el proceso electoral de 2021, por lo que nació un problema de participación juvenil. Además, comenta que estas pláticas funcionan para conocer más la percepción que tienen los jóvenes sobre la política.
El estudiante de sociología comentó que la apatía a la política está muy fuerte en la juventud actual, por lo que asegura que el camino a trazar es enseñarles que el día a día está relacionado con la política, al igual que muchas problemáticas, y su misma solución.
“¿Es posible romper esa barrera y quitar el estigma negativo que tiene la política?”, pregunta Nuevo Sonora, “Generando los espacios adecuados, y cuando hablamos de dirigencias juveniles, muchas veces su narrativa no coincide con lo que hacen en la práctica, y así los jóvenes no se van a querer involucrar”, sostuvo.
Es la misma tónica de los las dirigencias juveniles, Juan Pablo considera que hoy en día estos espacios se están utilizando como plataforma para llegar a un puesto político en el futuro, y se abocan meramente a la simulación, de dar la idea de que “hay jóvenes”, en vez de verdaderamente sumar al equipo.
Sobre el papel real que deben de tomar, es de ser el espacio donde la juventud se involucre en los principales problemas de la sociedad y que busquen la solución, ya sea con algún proyecto o nada más poniendo un grano de arena a las labores que se hacen en pro de la sociedad.
Respecto a la posibilidad de dignificar la política, el joven asegura que es posible siempre y cuando se busque hacer las cosas diferentes en todos los niveles, desde los más grandes hasta los más jóvenes, cambiar las cosas a mejor.
¿Cómo se encuentran los ánimos en Juventud Verde?
Los jóvenes muy bien, hemos estado con diferentes programas y ha sido muy bonito porque hemos estado haciendo espacio y han estado llegando jóvenes; abrimos un programa de alfabetización con niños en pobreza extrema y me dio mucho gusto ver que son estudiantes de ciencias sociales, trabajo social, psicología, todas son voluntarias y son jóvenes interesadas en ayudar. Me he sentido muy agusto trabajando con ellas.
Se llevó a cabo el Premio Juventud Verde, ¿cuál fue la recepción que tuvo?
Se le reconoció mucho en las universidades a los ganadores del premio y eso me encantó porque era parte del objetivo, que se visibilizara y que les dieran posición a ellos en el aspecto de la percepción. Estuvo muy bonito el evento, fue muy juvenil, práctico y salimos muy felices, lo coordinó Eduardo Quiñonez conmigo y la verdad que estuvo muy bien.
En conjunto con el IEE y el ISJ están realizando las pláticas: “Mi Primer Voto”, ¿en qué consiste?
Quiero aclarar que no es un tema de la dirigencia juvenil, lo hago a nivel Juan Pablo. Me invitó el IEE, tenían ellos esta preocupación de que en Sonora de los jóvenes que podían votar las elecciones pasadas solo lo hicieron el 30%, eran 500 mil los que podían votar y solo fueron 173 mil. Hay una preocupación muy fuerte del tema de la participación juvenil y el IEE ya tenía ciertos temas que quería dar a jóvenes primeros votantes en el 2024, cuando me hablaron entre el ISJ y el IEE, me hablaron para tropicalzarlos precisamente a algo más juvenil.
¿Qué perspectiva tienen los jóvenes de la política?
Hay una apatía muy fuerte, en las pláticas es hacerles ver cómo en nuestro día a día es política, entonces el punto es como hacerles ver que las preocupaciones que tienen ellos hoy en día se relaciona al servicio público y se relaciona a quién estamos votando. Somos jóvenes más conscientes de los problemas, una generación que genuinamente ya acepta muchos temas.
¿Es posible romper la barrera de la apatía?
Sí, creando los espacios adecuados y para eso hay que pensar mucho de cómo generarlos. Para mi la importancia recae en dejar de simular y dejar de simular entra en un aspecto desde que tu narrativa sea congruente con lo que estás haciendo y que haya más fondo en las actividades políticas. Mientras no generemos espacios en donde el joven pueda ir a participar y se sienta congruente con eso, el perfil de joven que va a estar llegando no va a ser uno interesado en ninguna problemática.
Las dirigencias juveniles de los partidos, ¿dignifican la política o hay más simulación?
Lamentablemente creería que es más lo segundo en el aspecto de que sumar jóvenes la percepción es con una foto, decir bienvenidos y tal vez nunca hacer nada con ellos, inventarse un puesto… eso es muy normal en los jóvenes, ¿como le hago para verme en el mapa? Veo que se prioriza que parezca que hay jóvenes en lugar de adquirirlos. Cuando priorizas primero la narrativa política en lugar de la causa, al final de cuentas termina siendo simulación, entonces creo que hay un reto enorme en dignificar la política entre los jóvenes.
¿Es posible dignificar la política?
Sí, siempre y cuando exista esa apertura de dignificar ya tiene la connotación de hacer las cosas diferentes, dignificar va a significar que el jefe acepte que el joven va a tener que a hacer cosas diferentes a como él o ella, va a hacer las cosas diferentes a como las hacía porque va a cambiar las formas y eso es dignificar, cambiarlo a mejor y claro que se puede en ese aspecto, con un buen apoyo.
¿Cuál es tu relación con el IEE?
Es muy buena ya a nivel personal, estamos ahorita trabajando con las pláticas de “Mi Primer Voto”, me invitaron al foro de participación ciudadana.
Participaste en el foro de participación ciudadana, ¿cómo te sentiste?, ¿qué te dejó este foro?
Me sentí muy halagado por su invitación, la verdad es que, si estuvo muy padre, hablamos precisamente desde diferentes sectores la urgencia de su participación, se tocó mucho el tema juvenil porque fue el foco rojo más grande en las pasadas votaciones.
En Juventud Verde cuentan con 3 programas, ¿qué destacarías y cuál es la importancia de estos?
Ahorita vamos a empezar unas mesas de diálogo con jóvenes sobre temas diversos, medio ambiente, pobreza, salud mental, etc, pero el punto es cómo invitar a jóvenes que no están dentro del ambiente político a que generen espacio de reflexión para ellos, la segunda es Sembrando Vida que es un programa en donde invitamos a jóvenes interesados en el tema de la pobreza y estamos haciendo un programa de alfabetización a niños en situación de pobreza extrema y ha estado sensacional y las Ecoescuelas creo que la educación ambiental la hemos traído siempre y creemos que es una parte fundamental que no debemos de dejar nunca y ahorita vamos a empezar en Real del Carmen con una Ecoescuela y acaba de terminar una en el Cerro Johnson.
¿Cuál es la importancia de obtener resultados de los programas?
Son dos cosas, primero mejorar lo que se está haciendo mal, pero para mejorar tienes que medir. El resultado de alfabetización es que tanto mejoró el niño, el punto del programa es alfabetizar, si yo estoy dando mediciones y estoy dándole procesos logísticos puedo ver en dónde estoy mal y bien, por lo tanto puedo ajustar el tornillo cuando veo que algo anda mal para así alfabetizar a los niños, si yo no mido resultados ni procesos que tengo en un programa yo estoy quedando a la buen de dios y según yo esta funcionando y confundimos mucho alcance con impacto y eso es un problema político muy fuerte con la simulación, le dicen impacto al alcance.
¿Cómo defines a Juan Pablo Ladriere?
Trato siempre de estar en un proceso de mejora, reflexión y siempre trato de darle espacios a los jóvenes que veo, que tienen una calidad moral como verdaderas ganas de trabajar. Me definiría como una persona muy reflexiva al momento de lo que estoy haciendo.
¿Cómo te gustaría ser recordado?
Como una persona que nunca puso primero un interés político que hacer las cosas bien, que no empezó a hacer las cosas más por su apariencia que porque tengan un impacto en la realidad de la gente.
¿Cuál es tu meta personal de vida?
Seguir impactando en los programas, seguir dignificando la calidad de vida del agente y creo que llevo mucho tiempo tratando de ponerme al servicio de las personas, el tema ambiental es prioridad, pero a mi siempre me ha movido el tema de la pobreza y creo que es algo que nunca voy a dejar, independientemente el puesto en el que esté voy a estar haciendo programas al respecto.
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