+ La CTM denuncia regresión en conquistas de trabajadores; la izquierda morenista aprobó reformas a la ley y Villarreal anuncia acciones para frenarlas por lesivas al obrero; Bours, silenciosamente visita Guaymas; constata grave contaminación social y necesidades empresariales
Agustín Rodríguez L.
GUAYMAS, Son.- Javier Villarreal citó ayer a rueda de prensa para explicar el impacto a resentir por más de 290 mil trabajadores en el país, sólo de la Industria minera, si dejan que se haga efectiva la aplicación de reformas a la subcontratación laboral.
Villarreal es dirigente del sindicato Minero de la CTM y se opone a las modificaciones en el artículo 127 de la Ley Federal del Trabajo, en el rubro del reparto de utilidades, cuyo límite fijado sería 3 meses del salario o el promedio de esa participación en los últimos tres años.
Escoltaban a Javier otros dirigentes mineros al señalar que la iniciativa recién aprobada por el Congreso de la Unión, es un atentado contra derechos adquiridos de los trabajadores.
De entrada, los liderazgos mineros reunidos en su representación en Hermosillo, anuncian lucha jurídica y sindical a partir de solicitar amparo de la justicia federal; luego, los propios mineros determinarán más acciones para frenar esa reducción al 10% otorgado históricamente por la productividad generada.
Si eso de los tres meses no lo aceptan, menos eso del promedio de los últimos tres años del reparto de utilidades, pues es más agresivo aún, en un tiro directo contra la industria minera, donde resaltan precisamente las utilidades “muy considerables al trabajador”.
Un mensaje claro de Villarreal: los trabajadores cetemistas repudian que se pague con derechos de los trabajadores los acuerdos que se hacen entre el gobierno y los empresarios; y este sería el caso, aunque hay tiempo para atajar esta medida que comenzaría a aplicarse hasta mayo de 2022, “cuando el trabajador podría resentir los estragos con una reducción aproximada del 20 al 30%”.
Martín Díaz, representante de la sección 08 de Cananea, confirma números: percibirán un 25% menos y el año anterior, solo en este lugar, unos 2 mil trabajadores recibieron 900 millones, en su mayor parte derramados en el municipio.
Villarreal lamentó que los Legisladores hayan afectado derechos adquiridos de los trabajadores mineros y le extraña que quiénes en su discurso dicen defender, precisamente, a los trabajadores, en su accionar en la Cámara baja los traicionan.
Tendrá razón. Si un diputado al servicio de la mafia del poder y del ultraconservadurismo derechista depredador lo hace, se supone es normal. Pero ¿de la izquierda morenista transformadora en Morena? Algo no encaja.
RICARDO EL SILENCIOSO
Ricardo Bours Castelo estuvo en Guaymas este miércoles, pero su visita tuvo poca difusión.
Dice el boletín típico que fue a una colonia nunca antes visitada por un candidato a gobernador. Eso le dijo una niña de la colonia Bicentenario, en el abandonado sur de la zona urbana guaymense.
El documento que me envían habla de la preocupación del candidato por ese lugar, “una zona donde los ejecutados, la venta de drogas y la inseguridad son problemas constantes”. Eso confirma que sí fue, pues esos son los problemas cotidianos que parecen no tener fin, y ni quién ponga coto a tan difícil forma de vida, tan difícil que ya ni se nota la falta de alumbrado, drenaje, recolección de basura, pavimento y el agua potable llega un día por semana durante 2 o 3 horas.
Bours ofreció regresar y gestionar las exigencias de los vecinos, antes de ir al contrastante San Carlos, donde comió con prestadores de servicios turísticos y recibió peticiones específicas. No entendí eso de que se ocupa un muelle turístico, en un lugar donde hay marinas amplias y con servicios de excelencia.
Eso sí, tiene razón al hablar de buscar más infraestructura hotelera para fortalecer el turismo que provoca gran derrama económica en los municipios; también al criticar las actuales medidas sanitarias del Gobierno Estatal y el Municipal, como esa de cerrar playas y balnearios en Semana Santa, cuando el turistero capta la derrama más importante del año.
Y acusa: “El gobierno tiene secuestradas las actividades, determina quién trabaja y quién no trabaja”, pues en Hermosillo pasó lo mismo, igual en Bahía de Kino y eso fue un golpe bajo, pues los prestadores de servicios estaban esperanzados en poder sacarse la espina un poco.
Comió en una preciosa casa frente al mar, donde se hizo presente el candidato a diputado federal de Movimiento Ciudadano, Daniel Baranzini, quien llegó con las botas bien “boleadas”, presuntamente porque solo baja de su carro para ir a lugares así.
El más lugar más modesto que ha visitado el aspirante a legislador que saltó de Morena a MC, me abunda la fuente grilla, es el desayunador del “Chino” Zaragoza, junto a la alberca del hotel “Armida”. Esto se refiere a lo mismo que, lapidario, afirmó hace unos días Manuel Villegas, el candidato a alcalde por ese movimiento: “allí sentado no va a ganar la elección”.
COMMENTS