Por Agustín Rodríguez L. / Estas Líneas
GUAYMAS, Son.- Durante muchos años el país maduró ideas que con el tiempo cristalizaron y una de ellas, era terminar con el centralismo convertido en pesado lastre.
Leer sobre decisiones tomadas a dos mil kilómetros de distancia, me recuerda a los años 80, cuando se exponía lo negativo de imponer aquí decisiones venidas del centro y se llegaba a la amenaza de renunciar al pacto federal –lo que Enrique Alfaro refrescó hace poco en Jalisco—, acentuadas precisamente como ahora, en períodos electorales.
El tema vuelve ahora que el presidente López Obrador presentó su proyecto de presupuesto federal de egresos para 2021, que hizo rasgar vestiduras a gobernadores y líderes políticos opositores a Morena, donde destaca la reducción drástica de recursos a las entidades.
Lamentan la visión centralista del presidente aunque algunos se callan. De alcaldes ni hablar, en el altiplano ni los “pelan”, pero la coincidencia es, el presupuesto no servirá para enfrentar la crisis. Peor, quita recursos a rubros fundamentales como la educación o la seguridad.
Sonora escuchó la opinión de sus liderazgos y fue obvio el latigazo verbal de, por ejemplo, el priísta Ernesto de Lucas o el panista Ernesto Munro, por citar a los más representativos.
Pero la reacción más importante es la de quien vela por los intereses de Sonora, Claudia Pavlovich, la gobernadora, y ella respondió firme al tijeretazo brutal de recursos esperados para la entidad que gobierna con reconocimiento nacional por su orden y transparencia financiera: “no voy a quedarme de brazos cruzados”.
Buscará que ese presupuesto incluya más obras para Sonora y llama a los diputados federales a apoyar esta gestión.
La Federación incluyó para 2021 únicamente la obra carretera Agua Prieta-Bavispe (tierra de Alfonso Durazo), dejando de lado programas urgentes para proseguir el rescate de vialidades, infraestructura educativa, carreteras y hospitales en lo que se ha trabajado con intensidad.
“La verdad estoy muy extrañada, voy a pedir una cita con el Secretario de Hacienda, pero también sé que los diputados federales pueden hacer su lucha y muy fuerte junto a mí por nuestros alcaldes, por nuestros municipios y por nuestra gente”, expresó la mandataria, porque “Sonora no somos una obra, somos casi 3 millones de habitantes y merecemos ser tomados en cuenta”.
Es bueno considerar la carretera hasta el pueblo de quien podría ser el próximo gobernador de Sonora, pues el propio presidente dijo que la construiría, pero “no es suficiente para lo que el Estado necesita”, sostiene doña Claudia al aceptar la escasez de recursos, pero “una sola obra para todo Sonora, me parece totalmente fuera de lugar”.
Hay tiempo de enmendar las cosas y es bueno convocar a los diputados federales, por aquello de que hayan olvidado algo en su gestión. O gestionar, simplemente.
Si se nos complica analizar el proyecto presupuestal, vea este ejemplo que golpea el bolsillo de todos:
Cada año se tramita el subsidio al costo de la energía eléctrica para los 72 Municipios y hoy, por la pandemia, se necesita apoyo extraordinario para mitigar el impacto que resiente el gasto en el hogar. Pero no, el presidente no consideró eso. Ni muchas cosas más.
TIROS RÁPIDOS
1.- Seis ex secretarios de Salud afirmaron que hay una fórmula para acabar en 8 semanas con la pandemia del Covid-19.
No los fue bien en la respuesta del subsecretario López-Gastell, quien los llamó a patentar esa fórmula “porque eso se necesita en todo el mundo, puesto que en todo el mundo la epidemia sigue activa”.
A Mercedes Juan, Salomón Chertorivski, Julio Frenk, Guillermo Soberón, José Narro y José Ángel Córdova, el funcionario federal de moda les pidió compartir la información a la Organización Mundial de la Salud y al canciller Marcelo Ebrard Casaubón.
Socarrón, expresa que es “alentador ver que la gente tiene iniciativa” y cuestiona con sutil ironía, que si hay una fórmula tan innovadora lo hubieran presentado antes (dejaron morir gente pues, en todo caso) y “no es reclamo, cada quien lo presenta en el momento oportuno”.
Y el martillazo: “no sabe” si este anuncio fue auspiciado por un partido político, pero alude a la dirección del documento de origen: la misma de Movimiento Ciudadano.
Luego, el remate: reconoció la experiencia de los ex secretarios, su “vinculación” (¿?) con empresarios, comercialización de medicamentos, carencia de hospitales; y reitera la marcada ironía al considerar que el anuncio fue “una acción filantrópica”, no un intento de golpe político. Otro punto para 4T, que no las trae todas consigo, pero sus detractores tampoco.
2.- Qué grato charlar en medio de toda precaución por la pandemia, con el reconocido político e historiador Bulmaro Pacheco y el leído columnista Mario Rivas Hernández. Debimos poner pausa para reencontrarnos en breve, pues los temas dan para mucho más.
En los intermedios, oportunidad de saludar a Jesús Saldaña, quien si el diablo –los “Chuchos” son el diablo en este caso—no mete la cola, será candidato del PRD a gobernador de Sonora y a sus próximos colaboradores en el proyecto de una nueva propuesta para la entidad: Gerardo Reyes, todavía presidente de Movimiento Ciudadano en Guaymas, y Servando Rodríguez, candidato independiente a diputado local por el XIII Distrito en 2018, pero le ganó, puntualiza, no Rodolfo Lizárraga, sino la “Ola López Obrador”.
3.- Con la primera semana del mes patrio inició el año electoral.
Es hora de atender la sugerencia de políticos de largo colmillo que en este momento prefieren la tranquilidad de la sana distancia, de fijarse bien si sus partidos ya tienen figuras para hacer una buena oferta, a partir de capacidad y conocimiento; si ya cuidaron su espacio en instituciones electorales, consejos políticos, liderazgos en barrios y aspectos asi. Si no, entonces olviden participar.
De salida, el director del Insabi, Juan Ferrer Aguilar, dijo a la gobernadora Pavlovich que en dos semanas se aprobarán recursos federales –unos 213 millones de pesos– para terminar el hospital de especialidades en Hermosillo. Buena noticia.
La mala, la disputa por el agua en la presa La Boquilla, en Chihuahua. No quisiera ver arder las cosas en esa gran entidad por donde la Revolución alimentó su triunfo y origen del principal movimiento insurgente atajado a sangre y fuego por el diazordacismo y el echeverriato.
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