Comunicación gubernamental en tiempos de la 4ta Transformación
La llegada de Andrés Manuel López Obrador a la Presidencia de la República, ha significado para la comunicación social un antes y un después, siendo una de las áreas de gobierno que ha emprendido, para bien o para mal, un verdadero proceso de transformación.
Nadie puede negar que cambió la forma de comunicar desde Palacio Nacional, pasamos de “lo que quiso decir al presidente” a un ejercicio de comunicación social diario, que sirve no solamente para informar, sino para generar opinión pública y marcar agenda setting.
Las mañaneras del presidente se ha convertido en un fenómeno de la comunicación y ha reinventado la relación entre la prensa y el poder, ya que desde su propia plataforma en redes sociales ha demostrado que puede llegar a la ciudadanía de forma directa.
De alguna forma las mañaneras han evidenciado a los trasnochados medios de comunicación que también han tenido que iniciar un proceso de transformación para seguir siendo útil a la sociedad y un vínculo verdadero entre el gobierno y las audiencias.
Sin duda, pasarán los años y seguiremos estudiando este nuevo modelo de comunicación gubernamental, que sirve también como un ejercicio de rendición de cuentas y una arriesgada apuesta de exponerse al escrutinio público prácticamente todos los días.
No está de más decir que la mañanera se ha instaurado como la principal tribuna del poder donde se podrá cuestionar si se usa con fines políticos, doctrinarios o desde ahí, se va construyendo una narrativa que mantiene vigente el discurso de héroes o villanos.
Lo que no se puede cuestionar, es que el Presidente de la República resultó un mago de la comunicación y encontró el canal perfecto para hablarle a su audiencia, incluso utilizando el mismo código y lenguaje del ciudadano común que se autopercibe como el pueblo bueno.
Un nuevo modelo de comunicación gubernamental en Sonora
En Sonora, durante la campaña para la gubernatura en 2021 ya se asomaba un nuevo modelo de comunicación social, no por el proselitismo del candidato Alfonso Durazo, sino por sus propuestas para la transformación vertidas en un libro denominado Sonora 2021.
Precisamente en el primer tomo, el Maestro Cuauhtémoc González presenta un ensayo denominado “Comunicación Social estratégica del gobierno de Sonora: hacia la austeridad, honestidad y combate a la corrupción”, donde se trazan las nuevas formas de comunicar.
Además de un completo análisis y diagnóstico de la comunicación gubernamental en Sonora, se presentan cinco propuestas fundamentales priorizando los principios de austeridad, honestidad y combate a la corrupción, de lo que se desprende lo siguiente:
que el gasto de publicidad institucional no rebase el 0.1 % de su presupuesto de egresos aprobado por el Congreso, además de la reducción a la mitad del presupuesto aprobado para servicios de comunicación y publicidad en referencia al ejercicio fiscal del 2020.
“En cuatro a los principios de honestidad y combate a la corrupción, se propone la creación de la comisión estatal de comunicación social, con la integración de Radios Sonora, de Telemax, de asociaciones civiles y profesiones de la materia”, cosa que sucedió más adelante.
En las propuestas también se contempla mantener la propiedad gubernamental de Radio Sonora y Telemax, además de la consolidación de la cobertura de sus señales abiertas en todo el territorio sonorense, así como su apoyo digital y de medios públicos nacionales.
Por último, se proponen la implementación de mecanismos efectivos de transparencia y rendición de cuentas, y que esto contribuye a eliminar la discrecionalidad en el manejo financiero y la opacidad actual en la contratación de la publicidad oficial estatal.
Pero, ¿se ha transformado la comunicación social en Sonora?
Luego del triunfo del proyecto de la Cuarta Transformación en la gubernatura de Sonora se empezó a dar una nueva forma de informar la cosa pública, incluso en el proceso de entrega recepción ya se asomaba lo que podría significar este nuevo modelo comunicativo.
Sin duda, la trayectoria de Alfonso Durazo y su experiencia en el tema de la comunicación invitaban a pensar que las cosas iban a mejorar, aun cuando Morena y el proyecto venían con telarañas mentales en cuanto al papel de la prensa y periodistas en la entidad.
Y así lo fue, dejando atrás el encono de algunos comunicadores sociales el gobernador instauró una nueva relación con los medios de comunicación, informando una vez por semana las acciones de gobierno, pero también respondiendo preguntas de la prensa.
Esto contrastaba no solamente con la administración pasada, donde si bien no se vivió una relación tormentosa entre el gobierno y la prensa sonorense, si había mucha opacidad y prácticamente había una mandataria muy alejada de los medios de comunicación.
La “buena prensa” del gobernador al inicio de su administración se sostuvo de dos pilares fundamentales, el perfil de Alfonso Durazo y del director de comunicación Edgar Sallard, ya que en ese momento aún no se creaba el Sistema Estatal de Comunicación Social.
Además de un manejo de imagen formidable en esta primera etapa por personas de la Ciudad de México, que permitió una transición tersa de gobierno ante los ojos de la ciudadanía, así como el buen manejo de nuevos conceptos como el de “oportunidades”.
Dos apuestas interesantes en este tema fue el nombramiento de dos jóvenes como titulares de los medios públicos del estado, Paulina Ocaña en Telemax y Tirso Amante en Radio Sonora, trayendo consigo nuevos estilos y sobre todo, nuevas formas de hacer política.
Independientemente de que cada quien tiene un estilo particular, considero que donde se han dado cambios sustanciales y se ha notado una transformación es en Radio Sonora, enfocando su contenido en temas culturales y regresando la esencia pública del medio.
Mientras que en Telemax entiendo que los problemas no necesariamente pasan por la modificación de imagen, generación de nuevos contenidos y una barra programática más atractiva, sino asuntos que van desde los financieros hasta lo laboral.
El Sistema Estatal de Comunicación Social y nuevos mandos.
Luego de una reforma a la ley orgánica del ejecutivo del estado en diciembre del 2021, se llevó a cabo la creación del Sistema Estatal de Comunicación Social, un organismo con sentido de Estado, cuya función principal es orientar y educar a la población.
En una de los últimos eventos de Edgar Sallard señaló que se impulsó desde el inicio de la administración un nuevo modelo de informar a la ciudadanía sobre las acciones de gobierno a través de una relación transparente y renovada con los medios de comunicación.
Asimismo, destacó que, con la llegada del gobierno de la transformación, se han puesto en práctica cambios positivos y necesarios en materia de comunicación gubernamental que obedece a la nueva realidad de informar de manera directa, veraz y oportuna.
“Un ejemplo de este cambio de paradigma lo representan las conferencias semanales del gobernador del estado, a través de una comunicación circular con las y los reporteros, algo que no se veía, por lo menos desde hace dos administraciones estatales”, indicó.
Por instrucciones del gobernador Alfonso Durazo en noviembre del año pasado Paulina Ocaña deja la dirección de Telemax para ser nombrada como la nueva coordinadora ejecutiva del Sistema Estatal de Comunicación Social, generando desconcierto en el gremio.
Nunca pusimos en tela de juicio la capacidad técnica y política de Paulina Ocaña, incluso el recurrir a una joven a esa posición es motivo de reconocimiento hacia el gobernador, sin embargo, cuestiones como la experiencia, sensibilidad y oficio crearon cierta suspicacia.
A cuatro meses de la llegada de Paulina Ocaña he de reconocer que no ha habido hasta el momento una crisis de comunicación, sin embargo, es evidente que se construye una nueva relación con directivos y periodistas de diferentes medios de comunicación.
Y no me refiero al trabajo de dar la palabra para que pregunten en la conferencia semanal del gobernador, sino a la relación comercial del gobierno estatal con la prensa, la cual sí ha externado en los últimos meses un trato más institucional y menos personal.
No es el sistema ni la comunicación, son las personas
El analizar la comunicación gubernamental tiene bastantes aristas, pero creo que se han hecho una serie de modificaciones que podrían sentar las bases para una nueva relación de prensa y estado, pero sobre todo un nuevo modelo de comunicación social en la entidad.
No obstante, mientras las personas encargadas de llevar a cabo esos sistemas no estén capacitadas o bien, antepongan intereses personales y protagónicos ya sea para posicionar su imagen o un tema ideológico, se desvirtúa cualquier avance desde lo institucional.
Otro aspecto que también influye en el tema de comunicación social, es sin duda, la llegada de una nueva clase política que ha dejado claro su intolerancia a la crítica, misma que evidencia con el amedrentamiento a periodistas y el condicionamiento de contratos de difusión.
Pues mientras se pretenda desde el gobierno seguir regañando a reporteros y retirando convenios de publicidad, se seguirá replicando en Sonora un estado autoritario y opresor, que amaga y violenta el derecho de prensa y sobre todo, la libertad de expresión.
En eso sí, no ha habido ningún cambio y mucho menos una transformación, aún cuando pregonaban como oposición tener una visión democrática y evidentemente la voluntad de escuchar todas las voces para construir un estado conciliador y abierto al diálogo.
Esperemos que los comunicadores sociales del gobierno sigan el ejemplo del gobernador, que asume la responsabilidad de su cargo y se expone semanalmente al escrutinio de la prensa, pero sobre todo que acepta la crítica y no se anda con telarañas mentales.
Ya no me alcanza para hablar de la comunicación social de los otros poderes del estado, sobre todo del legislativo en donde lastimosamente en legislaturas pasadas se ha usado el presupuesto en comunicación como un botín a cargo de la publicación del boletín.
Creo que hay tiempo de rectificar y mejorar los criterios a la hora de elegir los canales adecuados de difusión, dejando de lado la discrecionalidad, la supuesta corrupción y el negocio personal del presupuesto de comunicación, que se practicaba en antaño. Es cuanto.
COMMENTS