Unas por otras, intercambio de “cartitas” | Monitor por Alan Castro Parra

HomeCOLUMNAS

Unas por otras, intercambio de “cartitas” | Monitor por Alan Castro Parra

Unas por otras, intercambio de “cartitas” 

Previo a la sesión de cabildo del Ayuntamiento de Hermosillo el pasado jueves, se había hecho mucho ruido respecto a algunos incrementos en la Ley de ingresos que realmente rayaban en lo absurdo, como un impuesto por exceder la basura doméstica, además de un aumento en el impuesto predial para destinarlo a “cuotas voluntarias”.

Sin embargo, luego del análisis y discusión, pero sobre todo la presión de algunos regidores de oposición y medios de comunicación, se logró eliminar ese par de propuestas, empero, se terminó votando un dictamen para la contratación de Obra Pública Multianual, esto con el apoyo de los regidores de Morena y el Verde, no así del PT y ediles independientes.

Si bien esto puede interpretarse como un triunfo de la oposición e incluso un buen mensaje de parte de la propia administración municipal al mostrar apertura e incluso voluntad política para modificar su propuesta original, como se fueron dando las cosas crea algunas suspicacias e incluso, varias interrogantes como: ¿qué hay realmente detrás de todo esto?

Por una parte, estamos convencidos que estas propuestas sí llevaban una intención clara y era con fines meramente recaudatorios, como lo ha demostrado desde el inicio la Tesorería Municipal, donde se ha reiterado en diversas ocasiones la poca sensibilidad de su titular y bajo el pretexto de supuestos ahorros, retirar derechos adquiridos, entre otras cuestiones.

Sin embargo, al no lograrse el madruguete e incluso socializarse de más estos temas, se optó por retirar estos puntos de la ley de ingresos para evitar un nuevo desgaste ante la ciudadanía, evitando así a la Flor Ayala salirse con la suya, y me atrevo a personalizar este tema porque es evidente que la tesorera actúa la mayoría de las veces por voluntad propia.

Y si bien, creemos que realmente sí había una intención de aumentar impuestos, también podemos analizar que estas impopulares propuestas podrían significar en algún momento fichas de cambio en la mesa de negociación, es decir, sacrificar estos temas para lograr el apoyo en otros, dicho en buen romance: “intercambiar cartitas”, ahora que están de moda.

En definitiva, estos aumentos no era un distractor para meter como caballo de troya el dictamen de contratación de obra multianual, sin embargo, sí sirvieron para cabildear otros temas prioritarios para el ayuntamiento de Hermosillo, como lo es el crédito a mediano plazo y sobre todo asegurar la construcción de obra pública en el municipio el próximo año.

Pero, ¿por qué los regidores de Morena y el Verde votaron a favor?, creo que es evidente que se necesitaran esos votos de vuelta cuando se ponga en consideración del Congreso del Estado la nueva ley de ingresos del estado y así como el ayuntamiento siguiendo el ejemplo del presupuesto estatal, se buscará un crédito a corto plazo para el gobernador.

Además, que sería muy incongruente por parte de Morena y sus aliados, el señalar y condenar la contratación de deuda municipal, y la próxima semana en el congreso estar votando para adquirir deuda estatal, aunque en esta ecuación hay que dejar fuera al Partido del Trabajo quien en lo municipal votó en contra, y en lo estatal se va a empezar a cotizar.

En resumen, el Cabildo de Hermosillo el pasado jueves aprobó por unanimidad la ley de ingreso y presupuesto de ingresos luego que se retirar la propuesta original de incrementar algunos impuestos, lo que no se votó por unanimidad, pero sí por mayoría calificada con Morena, fue el dictamen de contratación de la modalidad de Obra Pública Multianual.

Ahora, ¿qué significa obra pública multianual?. Este esquema se caracteriza en principio, porque su ejecución es con capital aportado por inversionistas del sector privado, y el pago es con el flujo de recursos del Presupuesto de egresos del municipio, por un plazo de 33 meses. Los empresarios entran al quite, sin necesidad de pedir a un ente financiero.

Este mecanismo se dice que genera un beneficio tripartito, al Gobierno, al no descapitalizar o aumentar su capital de deuda; al contratista o constructor al otorgarle la licitación, porque le genera condiciones de desarrollo económico y empleo; y a la ciudadanía, debido a que la obra social e infraestructura contribuye a mejorar su calidad de vida y su comunidad.

Ahora, este dictamen aprobado el jueves contempla la rehabilitación de cruceros, parques y renovación del paso a desnivel en el bulevar Luis Encinas Johnson y calle Veracruz; yo esperaría que se estas obras sean muy bien vigiladas en todas sus etapas, desde la licitación hasta su ejecución, porque a veces se aprueban deudas y no hay obras.

¿Qué quiero decir con esto?. El pasado 14 de octubre del 2021 el Ayuntamiento de Hermosillo aprobó un paquete de obras por 550 millones de pesos en esta misma modalidad de obra pública multianual, prometiendo la contratación de empresas locales y transparentar los procesos de licitación pública, así como monitoreo de las obras.

El año pasado se contemplaba la construcción de 49 pavimentos nuevos con concreto hidráulico; 8 rehabilitaciones en cruceros con concreto hidráulico; 17 rehabilitaciones de bulevares y avenidas con asfalto; mejoras en 9 parques, 5 unidades deportivas, 3 Centros Hábitat y un proyecto de semaforización, solo pregunto, ¿usted sabe cuales son?, yo no.

 

La deconstrucción del ingeniero, ruinas

La pretérita semana se especuló mucho sobre la reaparición en el escaparate público del ex gobernador Eduardo Bours y su reunión con el actual gobernador Alfonso Durazo, sin duda puede haber muchas señales y sobre todo interpretaciones de las mismas, sin embargo, hay algo que acaparó toda mi atención y análisis: la personalidad del ingeniero.

En la deconstrucción de una persona podemos disipar dudas y derrumbar muros de pensamiento para volver a darle una nueva estructura, no obstante, corres el riesgo de quedar en ruinas, es lo que me pasó con Eduardo Bours cuyos recuerdos universitarios y lecturas pasadas me remontaban a un personaje muy distinto al de hoy.

Escuche con atención la entrevista realizada al ex mandatario estatal por el periodista Luis Alberto Medina, sin lugar a dudas por la relevancia del personaje y los temas abordados en este ejercicio se tiene un gran valor periodístico, pero este análisis no se enfocará en sus mensajes explícitos ni mucho menos entre líneas, sino simplemente en él.

Decir que Guillermo Padrés y Claudia Pavlovich nunca debieron ser gobernadores porque no estaban preparados, deja ver un velada pretensión y arrogancia de asegurar que el sí lo estaba, y por supuesto que es hasta ofensiva la incongruencia al decir eso y recordar como quiso imponer a un candidato que ni siquiera podía decir Miguel Alemán.

Presume su trayectoria empresarial y -aunque heredada- no la cuestionaré, pero si eso de estar preparado hasta de la lisonja cuando se llega al poder, pues si en algo se caracterizó como gobernador fue allegarse de gente aduladora que le hablaba al oído y le decía solo las cosas que quería escuchar, pues no se privó de esa famosa burbuja del poder.

Y aunque asegura que Beltrones no le quita el sueño, la historia e incluso las respuestas de la entrevista no oculta esas telarañas y fijaciones a la figura de Manlio Fabio, recreando situaciones ficticias y abonando al mito, eso sí, no tiene empacho en decir -sin prueba alguna- que no solo es corrupto, sino un corruptor, sin ser esto una obsesión. 

¿Te tomarías un café con él?, la respuesta más rápida y sincera es no, pero recapacita y dice que sí lo haría porque no tiene nada personal, sino simplemente visiones políticas distintas, aun así, está convencido que lo ha ido bloqueando en diferentes etapas de su carrera política como en el 97, 2003, 2009 e incluso antes, a principios de los 90s.

Más allá de todos los temas abordados en la entrevista, a Eduardo Bours le cuesta mucho reconocer algún error, pues para ello se requiere humildad, al contrario, responsabiliza a otros antes de asumir cualquier compromiso, incluso se atreve a señalar que Alfonso Elías fue un muy mal candidato, cuando fue él mismo quien se empecinó en imponerlo. 

Al tema de seguridad no me voy a meter, pero tampoco considero que tenga todas las respuestas para solucionar el tema de inseguridad que azota el estado, primero porque en su sexenio hubo algunas cuestiones delicadas que no vienen al caso, y segundo, eso de no pactar con el narcotráfico, me recuerda a una portada de Proceso en 2008.

En fin, reconozco el trabajo periodístico de Luis Alberto Medina y el personaje que representa en la vida pública del estado el ingeniero Eduardo Bours, e incluso su legado como gobernador, eso no está en tela de juicio, simplemente tenía un mejor recuerdo y hoy ya ha cambiado mucho mi percepción, y ha quedado en ruinas.

Pues, aunque muchos lo conocen desde hace varios años y por supuesto que en su etapa como gobernador -que no fue mala-, hoy la arrogancia, pretensión, poca humildad y sin un gramo de autocrítica no asumir nunca la responsabilidad me dejan claro su personalidad, pero sobre todo sus telarañas mentales y fijaciones al borde de obsesiones. Es cuanto.

COMMENTS

WORDPRESS: 0
DISQUS: