Desaparecer el outsourcing: duro golpe a una economía que agoniza
El presidente Andrés Manuel López Obrador firmó el pasado jueves una iniciativa de reforma para eliminar el outsourcing en México, misma que ya fue enviada a la Cámara de Diputados.
No se trata de algo nuevo, la amenaza llevaba cociéndose a fuego lento desde el año pasado con las primeras reformas fiscales de la gestión de la 4T, pero es ahora cuando dicha petición empieza a materializarse.
Para quienes no estén familiarizados con el concepto, el Outsourcing es el término anglosajón que se refiere a la práctica en la que una organización contrata a otras empresas externas o a un tercero para que se hagan cargo de una actividad o producción de la compañía.
El outsourcing es una modalidad de trabajo tan importante para el país que según cifras del INEGI, la actividad ha incrementado hasta en 48% en los últimos 10 años. El propósito de la propuesta de AMLO es tipificar el outsourcing ilegal al mismo nivel de delito que las factureras, por lo que se propone la prisión preventiva por estar relacionadas ambas prácticas.
Con esto, se busca proteger a los trabajadores que son los más perjudicados, ya que al utilizar la subcontratación laboral, muchas empresas retienen el impuesto sobre la renta (ISR), para no entregarlo al fisco o se dan casos donde los trabajadores son registrados con un sueldo menor para no pagar completo el gravamen.
Del mismo modo, se impide la generación de antigüedad, el seguro médico y créditos de vivienda y deja la puerta abierta a que algunas empresas utilicen esquemas de contratación viciados para hacer despidos masivos sin liquidaciones o indemnizaciones.
Entre los defensores de la 4T con una postura más moderada, hay quienes plantean la idea de que no se elimine como tal la subcontratación sino que se cambie la figura a prestación de servicios especializados o la ejecución de obras especializadas que cuente con un permiso de la Secretaría de trabajo y Padrón Público.
En este escenario, las agencias de colocación podrán intervenir en el proceso de contratación a través del reclutamiento, selección, entrenamiento, capacitación, entre otros. En ningún caso el intermediario se considerará patrón.
En condiciones óptimas, el outsourcing evita la necesidad de contratar a más personal dentro de la empresa, cambiar o ampliar la infraestructura, comprar equipo y mobiliario; es decir, reduce los costos de reclutamiento, operación y en general el tiempo.
Entre 2012 y 2018, el crecimiento promedio anual del número de trabajadores asegurados en el IMSS fue de 3.9 por ciento, mientras que el crecimiento del PIB en ese mismo periodo fue de 2.4 por ciento anual. Fue cuando empezó a cobrar mayor relevancia el concepto de “Freelancers”, trabajadores por cuenta propia sin establecer contratos de exclusividad; una de las modalidades del outsourcing muy usada por las nuevas generaciones de profesionistas especialmente en el ámbito digital.
En buen romance, esto significa que el crecimiento del empleo formal fue 1.6 veces superior al de la economía, lo que es atribuible en buena medida al avance en la flexibilidad laboral.
El gobierno actual omite que de aprobar la iniciativa que conocimos la semana pasada -en los términos del presidente- lo más probable es que tengamos una caída en la generación de empleo porque se perderá flexibilidad y se aumentarán los costos.
Es cierto que muchas empresas han abusado y en ocasiones han usado esta modalidad como un instrumento para evadir obligaciones fiscales y laborales, pero también es real que en optimas condiciones, se permite una mayor flexibilidad laboral. Como en otros temas, se opta por cancelar en vez de regular.
Ciertamente, los mercados han evolucionado al grado de que sería difícil desaparecer esta figura, pero de existir un cambio podremos ver una pérdida del volumen del empleo formal, pues una parte se va a perder -eso es un hecho- pero la otra parte va a pasar de la formalidad a la informalidad.
Lo más delicado de todo esto es el contexto en el que se desarrolla. Ante la pandemia atravesamos por un escenario de adversidad económica donde en México 44% del empleo total está golpeado por la pandemia; es decir, unos 24 millones de trabajadores podrían y han experimentado una disminución en horas o salarios e ingresos, según cifras de la Organización Internacional del Trabajo (OIT).
No solo eso, incluso la OIT advierte que la tasa de desempleo podría llegar este año a 11.7% de la población económicamente activa, equivalente a seis millones de personas.
En definitiva, mucha gente ha perdido sus trabajos, no recibe los mismos ingresos, existe un nulo interés por parte del ejecutivo en rescatar a la pequeña y mediana empresa que son el motor de la economía y todavía pretenden eliminar una modalidad de trabajo tan importante como lo es el outsourcing.
El prisma dispersa la luz y revela el espectro de matices de la semana
Gris.- Alfonso Durazo está consciente del desorden del Ayuntamiento de Navojoa.
Alfonso Durazo Montaño, el virtual abanderado de Morena para contender por la gubernatura de Sonora, está consciente del pesado lastre que implica la marca de Rosario Quintero para Morena con los múltiples señalamientos por presuntos actos de corrupción de la actual administración de Navojoa.
Así pues, se convierte en el primer Morenista de alto rango en deslindarse de la mala imagen que representa Quintero Borbón y que afecta directamente al capital político de Morena no solo en la entidad, sino en el estado.
Fue en una entrevista con Javier Lugo de Uniradio que Durazo Montaño afirmó que ‘en Navojoa hay mucho esfuerzo por hacer’ y que la señora ‘fue candidata del PT y PES’ no de Morena.
Hasta la fecha, los voceros y dirigentes de Morena en Sonora no se habían deslindado de la alcaldesa y de sus travesuras. El mismo Jacobo Mendoza, dirigente estatal del partido de la 4T en el estado, parecía solapar y defender las travesuras de la alcaldesa y del mandatario de Cajeme argumentando que para él eran solo situaciones mediáticas y que en todo caso, las instancias anticorrupción deberían haber intervenido.
Los diputados de la bancada morenista también forman parte de este círculo de cómplices. Griselda Soto del Distrito XIX ha defendido a la polémica alcaldesa y su actual administración no más de una vez. Ernestina Castro Valenzuela, al principio fue una voz de autocrítica para defender los principios del partido y repentinamente optó por el silencio. Los diputados Norberto Ortega Torres y Héctor Raúl Castelo Montaño votaron en contra del juicio político.
Navojoa y Cajeme representan un reto en materia política para Alfonso Durazo por el caos y la crisis de ingobernabilidad que impera y que se asocian a la marca de Morena. A pesar de que Alfonso Durazo sigue siendo el puntero en diversas encuestas que han circulado, los resultados de las elecciones en estados como Coahuila e Hidalgo ya nos dejaron claro que estos instrumentos realmente no sirven de nada y que no hay nada seguro para nadie.
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