- Omar Núñez, buenas cuentas a Flores Hurtado; fue prueba piloto, no plan de exportación de autos; MSN transporta contenedores hace 10 años y Ford se interesó; Amberes vino, también Mitsui
Agustín Rodríguez L.
GUAYMAS, Son. – Tardarán 6 días, pero la logística diseñada es precisa para que nadie quede sin uniforme al iniciar el ciclo escolar, en la entrega desde el 4 de julio a 16 mil estudiantes locales, que hará la Subsecretaría de Planeación y Finanzas de la Secretaría de Educación y Cultura.
Ya estará cumplida la meta en Empalme, donde serán 8 mil conjuntos entre este viernes 28 y el 2 de julio, coordinando labor la Subsecretaría de Rodrigo Flores Hurtado –él salvó la entrega el ciclo anterior y repetirá el logro– y la representación Guaymas-Empalme del maestro Omar Núñez.
Ya llegan a 60 municipios el proceso de distribuir uniformes escolares gratuitos que usarán alumnos de educación básica en el ciclo escolar 2024-2025, con lo cual la SEC mantiene un significativo respaldo a la economía familiar y promueve la reducción ya lograda en la nociva deserción escolar, esta vez invirtiendo 303 millones de pesos a favor de 440 mil estudiantes de 3,115 escuelas públicas de preescolar, primaria y secundaria.
Nadie debe perder este apoyo. El Estado hace gran esfuerzo, pero vale la pena, pues seguido el paquete entregado hace la diferencia entre seguir estudiando o no. Si hay dudas, esté al pendiente de lo que anuncie la SEC a través de las redes sociales oficiales.
De pasada, la SEC mantiene lustroso el convenio que cumple 14 años, entre el Colegio Nacional de Educación Profesional y la maquilera Tetakawi de los Seldner, Luis Felipe padre e hijo, formidables promotores de inversión y empleo.
Esta semana lo celebraron aplaudiendo logros en aprendizaje, capacitación y desarrollo técnico profesional, el director de Tetakawi, Armando Lee Quiroga, y Federico Nava, del CONALEP Guaymas. Lo atestiguó junto con la proyección para el futuro, el maestro Núñez Caravantes, quien agrega estrellitas a su palmarés en el sector educativo.
COMO SE DIJO, FUE PRUEBA PILOTO
Es comentada la falta de claridad en los mensajes ofrecidos por el área de comunicación del gobernador Durazo, distinto a lo que el mandatario hace en sus conferencias de prensa o en sus giras, por eso a veces le llueve entre quienes no tienen por qué adivinar si el mensaje oficial se equivoca, o si es informativamente insuficiente.
Me referiré a uno, el evento en los muelles del puerto marítimo comercial de Guaymas, realizado con escasos invitados para presenciar lo que sería el inicio de su transformación en un “Hub de Nearshoring Net Zero en emisiones” (Ah, qué difícil encontrar quién me explique qué es eso).
Lo de HUB sería un término usado por los técnicos al presumir conocimiento cosmopolita, pero debieran decir centro de carga y ya. Aquí aún hablamos castellano mezclado con el regionalismo sonorense tan rico.
Seguiré esperando la explicación del “net zero” y eso de caminar hacia el uso de energía limpia, que debe separarse de lo ocurrido el día 18 en uno de los muelles en modernización con 800 nuevos pilotes para sostener la plataforma sobre la cual se posarán grúas para mover carga que nos confirmará como puerto de contenedores, donde está el negocio, no en piedras y cereales.
Ese día, Ford Hermosillo trajo 4 autos para confirmar si podría traer muchos más, meterlos de dos en dos en cada contenedor y embarcarlos a Lázaro Cárdenas, donde se consolida carga –aquí se aplica eso de “HUB””—y se sube a un barco más grande para enviarlo al resto del mundo.
También mostraron la operación a funcionarios del puerto de Amberes por su interés en mover su carga por aquí, cerca del mayor mercado del mundo, y todo salió bien, por eso firmaron acuerdos con el Gobierno de Sonora de Alfonso Durazo, la Administración del Sistema Portuario, de Rogelio Bello, y la SeMar, del almirante Rafael Ojeda, con funcionarios de la autoridad portuaria belga.
Habría negocios con ellos y eso es buenísimo. Al decir del gobernador, el Puerto de Guaymas se convertiría en “un motor de desarrollo para la región, al abrir nuevas posibilidades para la conectividad y el comercio internacional”.
Las ha habido siempre, pero no siempre se aprovechan como hoy trata de hacerlo el mandatario, aún por encima de la característica burocracia de la concesionaria portuaria, que estaría erradicando el contralmirante Bello.
De paso, Asipona confirma en su regateada información, que antes de esta “Prueba piloto para exportación de vehículos” del 19 de junio, visitó la planta Ford en la capital para armar la prueba cuyo fin sigue siendo “ofrecer la infraestructura portuaria y continuar con el Proyecto de exportación de vehículos a través del Puerto de Guaymas”. Se programó para fines de mayo, pero la agenda del gobernador y los funcionarios europeos alargó esa fecha.
No sorprenden esas visitas. Al comenzar junio, Bello Aguilar recibió a representantes del grupo nipón Mitsui & Co., una de las mayores corporaciones empresariales del mundo, interesados en las obras, reordenamiento y expansión del puerto. Se fueron encantados. También allí habría negocio, pero no se informa quizá para “no entorpecer las negociaciones”.
Sobre contenedores, es parte del cabotaje periódico entre Guaymas y Manzanillo, con atraque en puertos intermedios. No hay un buque especial para llevar 4 carros. Se irán como parte de la carga que consolidad una filial mexicana de MSC Lines como será con 1,400 más en el resto de 2024.
Del descuido que lamenta el gobernador no tengan duda, pues teniendo el puerto un potencial mínimo de 12 millones de toneladas apenas está a la mitad.
En lugar de crecer como iba durante el sexenio de Felipe Calderón, se redujo lo alcanzado por la administración portuaria de José Luis Castro Ibarra hace 10 años, al sumar 8 y medio millones de toneladas. El año pasado se habló solo de 6 millones incluyendo el hidrocarburo que mueve a la región, aun funcionando las terminales especializadas inauguradas en aquel lapso. Ni el plan que materializó a la costosa Terminal Internacional de Cruceros se siguió.
Los expertos creen que, de no haber fracasado el propósito de Enrique Peña Nieto al firmar aquel plan de 12 mil millones de pesos para modernizar el puerto, ya serían 15 millones de toneladas, pero retrocedieron los subsecuentes directores del puerto, el grillo duranguense Adrián Alanís Quiñones; el exalcalde guaymense Edmundo Chávez Méndez; el hermosillense Abraham Larios; el contralmirante Catarino Hernández Tapia, con quien inició aquí la militarización portuaria –salió pronto, dicen que por piernas–, y ahora otro oficial naval, Rogelio Bello, quien rendirá buenas cuentas en breve, cuando debe entregar obras del programa de 13 mil millones de pesos aprobadas por el feneciente sexenio de Andrés Manuel López Obrador.
Eso es parte de la explicación de lo que se busca. Ya sabremos de avances.
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