El verano sonorense, se caracteriza por temperaturas extremadamente elevadas desde finales de mayo hasta mediados de octubre. En este contexto, el costo de la energía eléctrica se convierte en una preocupación central para los ciudadanos del estado, pues tenemos que recurrir al uso de aire acondicionado, más por necesidad que por placer.
Recientemente, en diversas ciudades de Sonora los ciudadanos manifestaron su incomodidad ante el incremento de las tarifas de luz y los adeudos generados durante el mes de agosto que representan un duro golpe a la economía de las familias; estos colectivos se dieron cita en las principales vialidades de ciudades como Hermosillo y a las afueras de las oficinas de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) para exigir un incremento al plazo del subsidio o una reducción en el costo de la luz.
De descuidarse y agravarse esta situación, podría tener implicaciones políticas significativas con miras al 2024, especialmente para Morena, el partido del presidente López Obrador.
La respuesta del Gobierno de Sonora, se dio la semana pasada. El gobernador Alfonso Durazo anunció medidas para aliviar la carga financiera de los usuarios y garantizar el suministro de energía durante todo el año. Durante conferencias de prensa conjuntas con José Martín Mendoza Hernández, director general de suministros básicos de CFE, se anunciaron acuerdos significativos que aliviarán la carga financiera de los consumidores sonorenses.
Uno de los principales cambios es la eliminación de un rango de tarifas, dejando solo dos tarifas subsidiadas. La primera tarifa, que abarca de 0 a 300 kilowatts por hora, se amplía a 0 a 1,200 kwh con la misma tarifa de .727 pesos por kwh. La segunda tarifa, que se encuentra en el rango intermedio superior, va de 1,200 a 2,500 kwh, pero ahora se factura a .91 pesos por kW, en lugar de la tarifa previa de 2.21 pesos.
Así mismo, la CFE ha tomado la decisión de suspender los cortes de luz durante el resto del año para aquellos usuarios que no han podido cubrir sus facturas. El gobernador Durazo Montaño enfatizó que se llevará a cabo una negociación individual con cada consumidor para acordar un prorrateo del pago que se extenderá desde septiembre hasta diciembre. Además, se ha decidido incluir a Hermosillo, Cajeme, Altar, Arivechi, Bacanora, Sahuaripa y Oquitoa en el nuevo rango tarifario, mientras que el resto de las localidades recibirán un apoyo del 25% en sus consumos durante diciembre, enero y febrero, para enfrentar las bajas temperaturas invernales.
La duración y el inicio del subsidio también se encuentran en consideración. Actualmente, se analiza si el subsidio se iniciará el 15 de abril y culminará el 15 de noviembre, o si se aplicará completo en uno de esos dos meses, comenzando el 1 de abril y finalizando el 31 de octubre o iniciando en mayo y concluyendo el 30 de noviembre. Estas medidas se toman con el objetivo de proporcionar un apoyo integral durante todo el año y aliviar las preocupaciones de los usuarios.
Uno de los anuncios más destacados es el aumento del subsidio de 590 millones de pesos a mil 200 millones de pesos, lo que duplica el respaldo financiero disponible para la temporada de verano, cuando las temperaturas alcanzan niveles extremos.
El gobernador Alfonso Durazo también está considerando la posibilidad de proporcionar subsidios adicionales durante los días en que es crucial reducir los costos energéticos.
En definitiva, es fundamental reconocer que estas medidas beneficiosas para los usuarios de energía eléctrica en el noroeste de México no habrían sido posibles sin la voz activa de la ciudadanía y su ejercicio de empoderamiento. Las protestas de inconformidad, las manifestaciones pacíficas y la presión ejercida por la comunidad jugaron un papel vital en poner este tema en la agenda política.
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