El presidente ruso, Vladimir Putin, visitará el martes Teherán, capital de Irán, para reunirse con el líder supremo, el ayatolá Alí Jamenei, en su primer viaje fuera de la antigua Unión Soviética desde la invasión de Ucrania.
Vladimir Putin considera que el intento de Occidente de paralizar la economía rusa con las sanciones más severas de la historia reciente es una declaración de guerra económica y dice que Rusia se está alejando de Occidente y acercando a China, India e Irán.
Según Yuri Ushakov, asesor de política exterior de Putin, “El contacto con Jamenei es muy importante, se ha desarrollado un diálogo de confianza entre ellos sobre los temas más importantes de la agenda bilateral e internacional”, dijo a la prensa en Moscú.
La visita de Putin a Irán coincidirá con la del turco Tayyip Erdogan, y ambos líderes se reunirán en la capital iraní para discutir un acuerdo destinado a reanudar las exportaciones de grano de Ucrania por el Mar Negro, y la amenaza de Erdogan de lanzar otra operación en el norte de Siria a la que se opone Moscú.
Al visitar a la República Islámica en su primer gran viaje al extranjero desde la guerra de Ucrania, el mandatario ruso está enviando un claro mensaje a Estados Unidos y Europa de que Rusia tratará de estrechar lazos con Irán, un enemigo del gigante americano desde la Revolución de 1979.
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