Los fabricantes de armas y municiones de Estados Unidos respondieron a la demanda que interpuso el Gobierno mexicano ante la Corte Federal del Distrito de Massachusetts, como parte del litigio que inició la Administración de Andrés Manuel López Obrador donde señaló que once compañías por prácticas negligentes que alimentan la violencia en la nación latinoamericana.
Las compañías estadounidenses argumentan que México falla en denunciar hechos que demuestren que las prácticas comerciales de los acusados son la causa inmediata de las lesiones causadas.
Las empresas estadounidenses exponen que los fabricantes no tienen la obligación legal de proteger al Gobierno mexicano de los delincuentes mexicanos que abusan de las armas de fuego en el territorio.
Según las cifras del Gobierno mexicano, anualmente se trafican ilegalmente más de 500.000 armas desde la nación norteamericana que alimentan “el poder del fuego” de las organizaciones criminales.
COMMENTS