“Un sweater de lana es tan cruel como lo es un abrigo de visón”. Con esta afirmación PETA se posiciona ante un tema poco controvertido: el uso de las pieles en la industria y el movimiento fur free.
Para nadie es un secreto que nuestra conciencia como diseñadores y amantes de la moda se ha expandido, hoy en día podemos decir que tenemos una mejor comprensión del mundo y su sostenibilidad. Aunque en la actualidad nuestro constante trabajo en la moda debe ir más allá que solo dejar de producir o dejar de utilizar fibras contaminantes. Hasta ahora los esfuerzos no han sido suficientes y esto deja en evidencia el estado en el que se encuentra el planeta, además, revistas importantes como Forbes han posicionado la industria de la moda entre los principales contaminantes del mundo.
La moda como espejo de la sociedad ha visto ahora reflejado el despertar de la conciencia global a través de este movimiento conocido como anti-fur o fur free. En los últimos años la ética de las prendas, la moda vegana y el movimiento sostenible se han unido en una misma vía que nos conduce hacía el futuro en el que la estética classy se ha desprendido de las pieles.
Aunque el daño provocado por años ha sido inminente, cada vez existen más marcas comprometidas a dar un cambio radical dentro de la industria. Casas de moda como Versace, Hilfiger, Michael Kors, Ralph Lauren y marcas como Calvin Klein, quien se despidió de las pieles en el 94 y hasta Hugo Boss, se han unido al movimiento Fur Free, dejando un mensaje claro, la lucha por la sustentabilidad. Esta causa es uno de los primeros pasos para llegar a la luz en dónde existe un bien común: la abundancia del planeta.
Aún, en pleno 2021, la moda sigue siendo un inminente contaminante y se ha convertido en una de las industrias que más factura en el mundo, debido al consumo del fast-fashion, que da por consecuencia los residuos de contaminación de la cuales muchos países intentan aminorar su huella atendiendo esta problemática, sin embargo, hasta el momento muchas marcas protagonistas de la moda no habían dado su brazo a torcer.
Tal como algunas marcas han desprendido su camino hacía este viaje, otras más también lo emergen. El francés de lujo Kering, ha dado un paso hacía adelante en materia de la sostenibilidad y el bienestar animal, anunciando que todas las marcas de su portafolio dejarán de utilizar pieles de animales, sin embargo, esta iniciativa dará inicio hasta las colecciones de otoño 2022, las cuales como cada año son presentados a principios de años, dando paso al Fashion Week en varias capitales.
Aunque son las marcas más pequeñas quienes han sido pioneras de este avance en la actualidad, la mayoría de las marcas del grupo Kering habían dejado de utilizar las pieles, partiendo con una de las casas de moda más importantes y reconocidas a nivel mundial: Gucci en 2017, Balenciaga, Bottega Veneta y Alexander McQueen, quienes sigilosamente dejaron de utilizarlas, pero no lo pronunciaron ante los medios de comunicación.
Así mismo, el Haute Couture, conocido por la creación de prendas únicas y confeccionadas a mano con materiales de la más alta calidad y por supuesto, hechas por artesanos expertos, se ha unido al movimiento anti-fur dejando atrás el comercio mundial de pieles. Este hecho marca una línea atemporal importante, debido a que dentro de la alta costura, las casas de moda juegan por tener un reconocimiento dentro de ella y a través de esta moda, lo que podría abrir paso al interés de muchas de ellas y seguir el ejemplo del Haute Couture.
No es el fin de las pieles, pues hay quienes han demostrado como Adrián López y Marte Cázares, que podemos reemplazar esta horrible práctica por la piel del nopal. Las firmas se van sumando poco a poco a la política fur free y aunque siguen existiendo opiniones diversas dentro de la industria, las redes sociales han conseguido que los consumidores expresemos nuestro enojo a través de ellas, alzando la voz y haciendo que las marcas puedan corrijan su error.
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